12/20/2014 - 20:13
Desde finales del año pasado decidí aportar mi grano de arena en la lucha que a nivel nacional están llevando a cabo muchas organizaciones y ciudadanos en contra de la técnica de extracción de gas conocida como fracking, pues estoy convencida de que no sólo es altamente contaminante y destruye los mantos acuíferos, sino que además genera temblores, como lo han demostrado expertos locales e internacionales (liga).
Me di a la tarea de documentarme y de por lo menos hacer el intento de difundir la información sobre el tema que pude recopilar, obteniendo muy buena respuesta de las personas que me escucharon y de quienes aún siguen visitando un video que subí a Youtube, en el que hago una exposición basada en diversas fuentes, con la participación del prestigiado especialista en geopolítica Alfredo Jalife (video).
En este intento por influir en la opinión pública me encontré con que hay entre la ciudadanía de Nuevo León muy poca noción del problema y en general las personas sólo conocen los supuestos aspectos positivos del fracking que presetan los medios de comunicación locales, principalmente El Norte, que se ha dedicado a promocionar esta técnica extractiva como una gran oportunidad de desarrollo económico (lo cual es falso como sostiene Jalife en el citado video), sin tomar en cuenta el grave e irreversible daño ambiental y humano que ocasiona. Por otra parte, el periódico El Horizonte —en el que por cierto Jalife tiene un espacio de opinión—, había sostenido una línea de franca oposición al fracking con artículos, notas informativas y análisis muy valiosos y objetivos; sin embargo, en días recientes acaba de dar un drástico giro al apoyar el proyecto Monterrey VI, que como hemos visto en otras publicaciones de este blog, está íntimamente ligado al fracking, pues aunque lo nieguen los voceros del gobierno de Nuevo León, es una obra pensada para abastecer de agua a las compañías que harán estas desastrosas perforaciones en nuestra región (nota).
Es por esto que me parece tan positivo que Milenio proporcione espacio para análisis como el de Alejandro González que aquí les comparto, en el que se menciona el caso del estado de Nueva York, que en una decisión histórica decretó la prohibición total del fracking tras una larga investigación. Sabemos que en México estamos muy lejos de tener autoridades como las de esas sociedades democratizadas, y que nuestra cultura de participación ciudadana es casi inexistente; pero si algo nos han enseñado las recientes jornadas de lucha por la justicia en el caso de los normalistas asesinados y desaparecidos en Guerrero, es que cuando nos unimos, los mexicanos somos capaces de hacer que el mundo escuche. Es así que ante ejemplos como el de Nueva York debemos retomar fuerzas y unirnos a quienes ahora dan la batalla contra el fracking a nivel nacional (por ejemplo la Alianza Mexicana contra el Fracking -liga-), y a quienes en Nuevo León combaten por la vía jurídica y la restistencia civil el proyecto Monterrey VI (como Rescatemos Nuevo León -liga-). Informémonos y sigamos, como dice Alejandro, cultivando en el desierto, pues estas valientes personas que ya iniciaron ese camino siguiendo la tradición de pelea contra la adversidad que nos dejaron nuestros ancestros, nos han demostrado que con trabajo tenaz y fe en el futuro, el desierto florece.
Preguntémonos, y preguntemos a nuestros mandatarios, como lo hizo el responsable del área de salud de Nueva York, si estamos dispuestos a que nuestros hijos y nuestras familias vivan en una comunidad en la que hay fracking. Respondámonos y actuemos en consecuencia.
Cristina Sada Salinas
Columna tomada de: liga