12/04/2014 - 03:35
La conciencia es como una lámpara.
Ninguno de ustedes baja a trabajar a la mina sin su lámpara,
¿no es cierto? Allá abajo la lámpara se convierte en nustros ojos.
Aquí arriba la conciencia es nuestra lámpara.
Vamos usándola para luchar.
Vicente Leñero, El Evangelio de Lucas Gavilán